Pregúntale a Miriam – agosto 2025

Querida Miriam:
Mi hermano y yo estamos haciendo todo lo posible para cuidar a nuestros padres, quienes tienen demencia. Nuestro papá tiene 82 años y nuestra mamá 84. A mamá se la diagnosticaron hace poco, cuando fue llevada a la sala de emergencia porque no podía respirar. Resultó ser ansiedad, pero también está cada vez más débil. Se le olvida comer o bañarse, y tanto ella como papá están bajando mucho de peso. Papá también está empeorando. Además, la casa está muy desordenada. Nosotros vivimos a varias horas de distancia.
Intentamos contratar personas para que los ayuden en casa, pero mis papás no los dejan entrar. También hemos tratado de hablar con ellos sobre mudarse, pero no quieren escuchar. Hace poco encontramos un lugar especializado en cuidado de memoria donde pueden vivir juntos en el mismo cuarto. Sabemos que su salud seguirá empeorando y que no es seguro ni saludable que sigan viviendo en esa casa. ¿Cómo podemos convencerlos de que mudarse es una buena opción?
— Hermanos preocupados
Querido Hermanos:
Sabemos lo difícil que es para los hijos adultos enfrentar una situación así, especialmente cuando viven lejos. Envejecer trae muchos cambios y desafíos, y la demencia lo hace aún más complicado. Es importante saber que la demencia afecta el cerebro y puede cambiar la forma en que las personas piensan y reaccionan. Por eso, a veces ya no pueden tomar decisiones usando la lógica o el razonamiento. Muchas veces, detrás de su comportamiento hay miedo, confusión y resistencia a recibir ayuda o hacer cambios.
Es probable que sus padres se sientan seguros en su casa porque es un lugar conocido para ellos. En lugar de hablarles de todo lo que ya no pueden hacer, podrían presentar la idea de mudarse de una manera que ellos puedan entender mejor. Por ejemplo, pueden pedirle al doctor de su mamá que le “recete” vivir cerca de otras personas para que se recupere y se fortalezca. Otra opción es que un familiar mayor, un amigo de confianza o un profesional les explique los beneficios de mudarse juntos a ese lugar.
Traten de ser pacientes y darles tranquilidad. Pueden proponerles una “visita de prueba” al lugar: pasar un día ahí, disfrutar de las actividades y la comida. Incluso podrían quedarse una o dos semanas. Aunque adaptarse a un nuevo lugar toma tiempo, una vez estando ahí, puede ser más fácil lograr que se queden.
También es posible que en algún momento tengan que considerar opciones legales para tomar decisiones por ellos, pero muchas veces un enfoque amoroso y de apoyo puede ayudar a avanzar sin llegar a eso.
Recuerden que cuidar de otros puede ser muy estresante, y es importante que ustedes también se cuiden. Pueden unirse a un grupo de apoyo para cuidadores, hablar con una trabajadora social o buscar apoyo en amistades.
Para más información sobre cómo cuidar a padres mayores o sobre lugares de cuidado de memoria, pueden llamar a la Línea de Ayuda de Alzheimer’s Los Angeles al 844-435-7259.
Atentamente,
Miriam
Si tiene alguna pregunta para Miriam, puede enviarla por correo electrónico a askmiriam@alzla.org.